Ayer me ofrecieron un bus para ir a visitar el mercado de Tarabuco (30Bs) y me pareció interesante. Tarabuco, conocido por sus carnavales, tiene como atractivo turístico el mercado de los domingos.
Dos horas después hemos llegado al poblado donde se puede encontrar productos textiles con curiosos dibujos, mercado de comida y otros productos. Todo ello con singulares dependientes indígenas yamparas vestidos con diferentes ropajes y sombreros.
Me he dedicado a hacer fotos a los lugareños y a comprar algún detalle a mis padres para que no digan que no me acuerdo de ellos. Es peso que quería evitar llevar en la mochila en los dos meses que me quedan de viaje pero he creido que es una buena oportunidad de comprar a precios económicos. Quizás los textiles de vivos colores no tienen nada que envidiar a las tiendas de artesanía de La Paz pero son igual un buen detalle.
Ya de vuelta he decidido coger el autobús de las 17:00 para ir a Potosí (20Bs). Y así lo han hecho tres viajeros solitarios que visitaron tarabuco conmigo: Roberto de Buenos Aires (Argentina), Marisol de Mendoza (Argentina) y Jonathan de Marsella (Francia). Para el camino me he comprado un par de alfajores (doble galleta con relleno de dulce de leche y espolvoreado de coco) para saciar el hambre. Parecen ser típicas de Argentina per por aquí ya se empiezan a notar igual que las empanadas tucumanas (rellenas de verdurs y hortalizas con picante) y las salteñas (rellenas de lo mismo pero con caldo).
Más de tres horas después hemos llegado a Potosí concretamente al hostal Koala Den donde pagamos 35 Bs por habitación comunitaria, desayuno e internet. El hostal está muy bien y concurrido por extrangeros de habla no hispana pero nunca he compartido habitación con extraños. Hay cajas con candados para guardar las pertenencias de valor. Lo único que me sabe mal son mís ronquidos que no serían un problema si en algún lugar de sudamérica vendieran las dichosas tiras nasales que abren las fosas para respirar mejor. Supongo que ya se quejarán mañana.
Hemos salido a buscar un sitio para cenar y parece que son días de festejos en Potosí, también es casualidad. Veremos qué se puede hacer estos días por aquí pero por ahoar puedo ver que Potosí es una bonita ciudad colonial con numerosas y preciosas iglesias. En sí, la ciudad parece atractiva cosa que veremos más a fondo mañana.
De cena, algo típico de Bolivia que es el piquemacho (carne de pollo y ternera con patatas fritas, ají y tomate. Está bueno pero pica un poco. Nos vamos a dormir que mañana tenemos una excursión interesante programada.